cordero en Lu -1

Acomodado en las mesas de LU, en el Hotel Casino, un edificio del siglo XVIII que se sienta frente a la “alameda” contigua a la catedral, y forma parte de los “portales”, donde se tienden mesas al paso del transeúnte, uno ve pasar al mundo y vive el ritmo pausado de la ciudad de Morelia.

Lucero Soto es una de las cocineras mexicanas más notables de nuestro reducido “stardom” de chefs del sexo femenino. Lo que propone LU “cocina de autor”, son platos con el mejor producto que provee la región y recetas que establecen dos cosas: respeto a las tradiciones y creatividad.

Chiles en Nogada LU -2

Sus chiles en nogada por ejemplo, son la versión michoacana de este famoso platillo, en donde un negro y un güero, comparten el protagonismo en el plato, ante una nogada exquisita, ligera, y mucho garbo en la confección.


 

Malteada de nata

 

Como parte de un hotel, el restaurante tiene que mantener un menú con posibilidades y opciones para todos, pero Lucero se ha guardado bien de maquillar el tema y entregar selecciones tradicionales como los uchepos, las enchiladas morelianas, las truchas de Pátzcuaro, las tostaditas y las quesadillas, así como bebidas como el chocolate prehispánico, preparado con miel de abeja y té de flores o su enfáticamente grandiosa malteada de pasta, al tiempo que incluye unas tortitas “de mi infancia” para los niños o carne a las brasas.

 

 

Pechuga lu

Pechuga de pollo estilo Pátzcuaro al carbon con jugo de naranja y adobo

Tartara lu

Pero los tesoros de LU son sus platos originales como las costillitas de cordero en mole blanco de boda salsa hecha de almendras y  macadamia que se sirve acompañado de un corunda; el filete salmonado con xanducata, que es una salsa purépecha preparada con chile arroyo o la ensalada de Jamaica y queso Cotija, fresca y deliciosa.

Mezcal en Lu

 


Orgullosa del mezcal de la región, Lucero te los sirve con una pequeña degustación de quesos Cotija, y ofrece vinos mexicanos y bebidas siempre mexicanas. Vende productos como salsas y dulces, quesos y otras cosas y también propone un menú degustación. Sus precios son extraordinarios, se puede comer excelentemente bien con relativamente poca inversión, y la cocina de LU es una referencia de calidad y evolución de la zona.