Etiquetas

,

Sonora Prime esquites -4

El nombre le queda largo y un poco pesado al concepto upgraded de Sonora Grill. Con varias sucursales distribuidas en Metepec, Puerto Vallarta, Polanco, Condesa, Insurgentes, etcétera,  la cadena se enfrenta a otros conceptos “Prime” con nuevos bríos y más aperturas.


No logra enamorarnos, ni entendemos cuál es la diferencia de fondo entre sus Sonoras normales y los Prime. Y no lo hace porque sus entregas, a pesar de ser pulcras, no conmueven al paladar. Les compro su ambiente bonito y más sofisticado, limpio y moderno, en la escena; alabo su actitud de servicio, que no precisamente la calidad de la atención; entiendo el esfuerzo en plantear un nuevo escalafón de ambiente que convenga música de “punchis” contemporáneo y no tan retumbón; acepto, sin muchas ganas, su lista de vinos mexicanos que los mismos meseros ofrecen con “faltas de ortografía” al intentar vender; pero y la carne… ¿qué, no era prime? Pues sí, pero casi toda es sterling, o sea, choice, en la mejor de las suertes, y si es prime, es más cara que en otros sitios y la calidad, no se siente, o por lo menos no en la boca, que sí en la bolsa.


Sonora Prime Costilla -5

Sonora Grill Prime se presenta como casa de cortes finos pero tiene más aptitudes de cantina moderna, (en el género de Porfirio’s o la 20) que otra cosa. Esa política de entregarte dos tragos por el precio de uno, le inyecta verdaderamente destrezas de bar, y claro, la concurrencia lo proyecta, lo entiende y lo cultiva, porque se agradece. Mucha fiesta, grupos amplios, mujeres llamativas y un ambiente casi de antro. Al final pagas por todo, porque lo que no inviertes en cocina lo inviertes en el trago.

Sonora Prime Timbal -2

Abren con entradas como la machaca de marlín, que es un tubo monstruoso que carece de presencia, y el sabo,r como que viene pero no va. Los montaditos, como el de salmón se ven envenenados por una salsa espesa que ni tery, ni yaki, y conste que el bocado no es malo, pero podría mejorar. Los de res se sienten mejor. La galería de opciones es más ambiciosa que realmente sabrosa, aunque las Lorenzas, unos bocados apetitosos y vulgares, puede que te llenen el momento con sus frijoles maneados cubiertos de queso abundante. También hay tártaras, tostadas de atún, carpaccios, croquetas…Sonora Prime Marlin -3

Las sopas más que buenas, como la de frijol, varias ensaladas golosas como la torre de jitomate (en foto), pero pedí una mixta con queso de cabra que tenía migajas de él. Fue de regreso y el chef mando suficiente. Las pastas, para quien no sea obsesivo con los temples, y toda una galería de tacos, chicharrones, cortes y demás, ofertados a distintos precios según sea la estirpe de la vaca.

Sonora Prime Salsas -1

Seremos sinceros, esperábamos más, además del nuevo maquillaje, pero más en la mesa. Confieso que sus taquitos de rib son ricos en la noche; sus tostadas con veneno, fantásticas; sus seis salsas de distintas graduaciones, irritantes y envolventes; sus postres, ambiciosos y enormes, etcétera, etcétera, pero si la apuesta era convocar a un cliente de clase media alta, difiero en que lo logren a plenitud. Uno va una vez y paga, a la siguiente regresa al Sonora Grill de siempre o se queda ahí, sólo para apurar unos tragos al calor de la noche.